Hola, soy Sara Soria, y en Mentes Despiertas comparto ideas y reflexiones para empoderarnos y combatir la desigualdad.
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Es posible que te estés preguntando dónde está el límite entre feministas y feminazis.
Si es así, siento decepcionarte. La verdad es que no hay ningún límite.
Las feminazis no existen.
Ahora te cuento por qué.
Primero vamos a empezar por lo básico: definir qué significa feminismo.
El feminismo es un movimiento político y social, que busca la igualdad de derechos y oportunidades entre todas las personas. Repito, busca la igualdad.
También me gusta la definición de Ángela Davis, por su sencillez: “El feminismo es la idea radical de que las mujeres somos personas”.
Simple.
Supongo que estarás de acuerdo.
Todavía hay quien piensa que el feminismo es lo contrario al machismo. Olvídalo, no son antónimos.
El machismo, es un conjunto de actitudes y creencias que promueven la superioridad del hombre sobre la mujer.
Y el feminismo no habla de superioridad, habla de igualdad.
No queremos aplastar a los hombres.
Queremos la igualdad. Reclamamos un espacio que nos pertenece por justicia social.
Queremos una sociedad más justa e igualitaria.
En realidad, todos deberíamos ser feministas, ¿no crees?
Nadie habla de machinazis
Aunque sea algo muy obvio, hoy que voy a hablar de feminazis me parece importante recalcar que el movimiento feminista nunca ha matado a nadie.
Nunca.
El machismo, sí mata.
El feminismo, no.
Según un estudio de la Organización de las Naciones Unidas realizado en 2017, se estima que unas 30.000 mujeres fueron asesinadas en todo el mundo por su actual pareja o su expareja.
En España, desde que se comenzó a contabilizar este dato en el año 2003 y hasta el año pasado, han sido 1.078 las mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas.
El feminismo, no ha matado nunca.
El machismo mata cada día.
Con estas cifras de asesinatos machistas, ¿nunca te has preguntado por qué la palabra feminazi la has escuchado muchas veces, pero nadie habla de machinazis?
¿No te parece, cuanto menos, curioso?
Mira.
Soy feminista desde hace muchos años. Mucho antes de que serlo fuera lo políticamente correcto.
Antes, la palabra feminismo producía rechazo. Cuando decías que eras feminista parecía que era algo horrible, como si eso te convirtiera en una persona que odia a los hombres.
Ahora que parece que se ha popularizado por fin que el feminismo es necesario, y se ha puesto de moda, lo que escucho últimamente son frases como estas:
El feminismo es necesario, pero algunas son unas feminazis.
Está el feminismo de verdad, y luego, las feminazis.
Bueno.
Vamos a recordar de dónde viene el término feminazi.
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Las feminazis son los padres
La palabra feminazi la popularizó en 1992 Rush Limbaugh, un locutor de radio y comentarista político ultraconservador estadounidense, que la utilizó para cargar contra las mujeres que defendían el derecho al aborto, comparándolo con el holocausto nazi.
Al final, feminazi no es más que un insulto para criminalizar el movimiento feminista, para desprestigiarlo. Una forma de denominarlo absolutamente despectiva y llena de prejuicios.
Lo que te decía, que las feminazis no existen.
Una feminazi es una feminista a la que insultan por reclamar la igualdad. No hay más.
Puedes estar en desacuerdo con alguna medida que propone alguna feminista. También yo lo estoy a veces. El feminismo es muy diverso y plural, hay diferencias de opiniones. No tenemos porqué estar de acuerdo en todo. Y es sano que haya debate.
Pero antes de llamar a alguien feminazi, acuérdate de que estás comparando el holocausto nazi, que ha matado a millones de personas, con el movimiento feminista que, insisto, no ha matado a nadie.
Si te molesta lo que una feminista está reivindicando, es posible que lo vivas como un ataque porque tienes privilegios de los que no eres consciente, y a los que no te interesa renunciar.
Es normal. No es fácil.
Mira, no te voy a engañar. Antes me indignaba muchísimo cuando escuchaba la palabra feminazi. Pero ya estoy en otra fase. Y el humor me parece el arma más poderosa para reivindicar, y para llegar a la gente.
Además es mucho más divertido reírse, que enfadarse.
Como decía la humorista Patricia Sornosa: ¿Cuál es el holocausto feminazi? ¿Hombres teniendo que planchar sus propias camisas?
Es que de verdad, ¿tanto te jode limpiar el baño, que me comparas con Hitler?
Esto que te voy a decir ahora es muy impopular y nadie me apoya, pero como ya estoy de vuelta de todo, te lo voy a contar. No hace falta que estés de acuerdo.
Me gusta mucho la idea de reapropiarme del insulto feminazi y reivindicarlo. Igual que los gays en su día se apropiaron del insulto “maricón” y luego lo utilizaban entre ellos, y lo mismo las lesbianas con el término "bolleras”.
El otro día vi una frase de Madonna apropiándose del insulto machista “zorra” que decía: “Soy dura, soy ambiciosa y sé exactamente lo que quiero. Si eso me convierte en una zorra, me parece perfecto”.
Pues parafraseando a Madonna, te digo lo mismo: “Soy feminista, y quiero la igualdad de oportunidades. Si eso me convierte en feminazi, me parece perfecto”.
Llámalo como quieras. Lo importante es que no nos silencien.
Como dice Nerea Pérez en este video tan divertido, si el feminismo te suena a cosas nazis, miratelo.
En el próximo email te voy a contar por qué pensar que eres imparcial y que no tienes actitudes sexistas empeora las cosas. Te va a dar qué pensar.
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Un abrazo,
Sara
Como decía la humorista Patricia Sornosa: ¿Cuál es el holocausto feminazi? ¿Hombres teniendo que planchar sus propias camisas?
Muy bueno, me he reído con la frase, estoy de acuerdo. Luis Piedrahita humorista y monologuista decía que "El humor es un arma de construcción masiva".
Claridad y sencillez en tus reflexiones Sara.
No puedo decir más que chapó.
Cuanta razón cuando dices que el feminismo no ha matado a nadie y el machismo mata todos los días. Es algo tan lógico, directo e impactante, que quien no lo entienda... jajajaja se lo tiene que mirar. La autocrítica es muy sanadora. Os invito a todas y todos a probar.
Y el humor todavía más. La vida ya es bastante complicada, para que no utilicemos el humor sano y refrescante para hacerla más llevadera y agradable.
Deseando leerte el próximo viernes.
Un abrazo mente despierta y clarificadora.
Jairen